La misericordia es la justicia del Amor

landscape mountains sky man

La ley de los hombres busca proteger a las víctimas y castigar al culpable. En la justicia del Amor, se busca la libertad que fue entregada a cada ser humano y la libertad es la responsabilidad de decidir por un bien superior. ¿Cuál bien es mayor que el amor? ¿Cuál gozo mayor que ejercerlo amando a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos?. 

YouTube player

La ley del hombre se interpreta en los tribunales, la Ley de Dios, la del Amor, se vive en la conciencia. Hay de nosotros si ante los ojos de los hombres nos convertimos en víctimas o esclavo del hermano o lo hacemos con nuestro hermano, para obtener ventaja de la ley. Pues nos echaremos el yugo del temor y la justificación.

Sigue leyendo «La misericordia es la justicia del Amor»

Permíteme sentirme en paz conmigo mismo/a y mi sexualidad

«Señor, tú lo sabes todo, tú sabes que te quiero»( Juan 21:15-19). Hay tantas cosas que me separan de ti y que están influyendo en mi vida, quiero estar contigo, quiero detenerme y platicarte como Padre e hij@. Hacer esta pausa y permitirte que guíes mis decisiones en este preciso momento.

Sana mi corazón y mi alma de las heridas emocionales que me llevan a buscar consuelo en el sexo

Sigue leyendo «Permíteme sentirme en paz conmigo mismo/a y mi sexualidad»

Oración para la reconciliación de pareja

Padre Nuestro ante ti somos quienes somos, pues has sido fiel a nosotros en lo próspero y en lo adverso, en la salud y la enfermedad, y nos has amado y respetado. Conoces nuestro pensamiento y sentimientos anidados hasta en lo más profundo de nuestro corazón. Nos amas hasta el extremo de dar la vida por nosotros.

Padre Nuestro creador del cielo y la tierra, de lo visible y lo invisible Todo lo sabes y todo es tuyo y sin embargo esperas pacientemente y con misericordia que te abramos la puerta para ayudarnos a poner en orden nuestra conciencia y retomar el rumbo del amor.

Padre Nuestro en Cristo, quiero reconciliarme contigo antes que a nadie: Te pido me perdones por no ponerte en primer lugar, amándote sobre todas las cosas. Tú eres el amor, origen, camino y destino de nuestra vida. Perdóname por olvidar amar. Perdóname por juzgar el bien y el mal y condenar y condenarme en mis juicios y justificaciones. Y hacerme esclavo de mis propias razones, como si todo lo supiera, como si conociera lo visible y lo invisible. Como si mi nombre fuera santificado. Perdóname por preferir el mundo al paraíso de tu amor. Perdóname por no cerrar mi puerta aunque fueran 10 minutos al día, para dialogar contigo.

Padre Nuestro clamo a tu Espíritu Santo, dame tu perdón para mirarme con el amor que me creaste y perdonarme por aquellos juicios que profería, por aquello que maldecía, por aquello que dejé de bendecir, por esa palabra que oculte, por esa ternura que detuve, por esa piedad que escondí, por esa soberbia y vanidad con que cubría la luz de tu amor en mí y en mi prójimo. Perdóname pues quiero perdonarme y transformar mis debilidades, mis defectos, mis ofensas, mis juicios en una bendición. Quiero bendecirme y bendecir a mi prójimo.

Padre Nuestro, Dios trino y uno, dame tu perdón para pedirle el perdón a mi prójimo, a mi pareja, pues también es tu amor mi prójimo. Ayúdame a perdonarle cualquier ofensa, de palabra, obra o de omisión. A quitar mis juicios, sentencias y castigos que le he impuesto y que me han esclavizado, nos han esclavizado y hemos perdido la libertad donde decidimos por el amor y así nos responsabilizamos de nuestros errores y aciertos. Ayúdame a descubrir el amor junto con mi pareja, para que reconciliados tú y nosotros limpiemos maleza, cochambre, tizne, resentimientos y rencores y caminemos en tu amor, hasta el fin de los tiempos.

En nombre de Jesucristo con tu Espíritu Santo te pido Padre Nuestro por esta reconciliación y ruego a Santa María Virgen, a los ángeles y a los Santos que intercedan por nosotros ante Dios nuestro Señor.

AMEN

ORACIÓN BREVE

Oh Jesús, a través de tu compasión, enséñanos a perdonar desde el amor, enséñanos a olvidar desde la humildad.

Ayúdanos a examinar nuestro corazón y a ver si hay alguna herida no perdonada, o alguna amargura sin olvido.

Permite que el Espíritu Santo penetre en mi espíritu y remueva todo rastro de enojo.

Derrama tu amor, paz y alegría en nuestros corazones, en proporción a nuestro vacío de propia complacencia, vanidad, ira y ambición .

Ayúdanos a cargar con ánimo la Cruz de Cristo.

Amén

Responsable de la publicación:
Juan Manuel D’Acosta López
Consejero Terapeuta en Misión de Amor

Rosario para la reconciliación de la pareja

YouTube player

Rosario para la reconciliación de la Pareja en Libro Electrónico y ADEMAS el MP3

Libro digital en PDF con el modo completo de rezar el rosario.
50 meditaciones enfocadas a la reconciliación de pareja.

Deja de invocar tu egoísmo

Alma mía, el Señor insiste en que pongas su palabra en tu vida, que la encarnes y la extiendas como bendición por el mundo. Simplementela escucha de su palabra parece difícil, pues hay tanto ruido en las preocupaciones y rencores, en el temor y los egoísmos del corazón, que alzarse sobre ese ruido requiere negarse y cerrar la puerta de los sentidos y las emociones para entender y comprender la palabra del Señor. Alma mía, su palabra tiene la fuerza y el sentido de lo que tanto anhelas.

Sigue leyendo «Deja de invocar tu egoísmo»

Dime donde fallé, te necesito

YouTube player

No hay pecado que no pueda ser perdonado, si nos acercamos a la misericordia de Dios con un corazón contrito y humillado. En este consolador Sacramento, altamente personal, Cristo continúa encontrándose con los hombres y mujeres de nuestro tiempo. Restaura la unidad donde hay división derrama su luz donde hay oscuridad y concede una esperanza y alegría que el mundo no podría dar. Mediante este sacramento, la Iglesia proclama al mundo las infinitas riquezas de la misericordia de Dios, esa misericordia que ha derrumbado las barreras que nos separaban de Dios y de los demás».

San Juan Pablo II Sigue leyendo «Dime donde fallé, te necesito»

Guía diaria de reconciliación de pareja

Ten a la mano un cuadernillo, como agenda, para ir apuntando tus descubrimientos, sobre las necesidades de tu pareja y como apoyar la para resolverla. También tus necesidades y un plan para disolverlas con el Amor que ha puesto el Señor en tu espíritu. agendar como resolver o disolver los conflictos

También pequeños papeles para escribir notas a tu pareja confiándole todas las bendiciones que encuentras en tu relación. O para recordar los pensamientos, palabras y obras que hayas tenido en tu relación sin poner el Amor en primer lugar, sin pedir o aceptar el perdón.

Sigue leyendo «Guía diaria de reconciliación de pareja»

¿Con qué autoridad juzgas?

Alma mía, cuando juzgas a tu prójimo, parece que fueras un juez justo y que todo lo conoces. Ante una ofensa o deuda, lo condenas y le aplicas el castigo, pero es injusto ser juez y víctima, es injusto desconocer a fondo los motivos que provocaron la ofensa o la deuda.

Jesús entró en el Templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo, para decirle: «¿Con qué autoridad haces estas cosas? ¿Y quién te ha dado esa autoridad?».
Jesús les respondió: «Yo también quiero hacerles una sola pregunta. Si me responden, les diré con qué autoridad hago estas cosas.
¿De dónde venía el bautismo de Juan? ¿Del cielo o de los hombres?». Ellos se hacían este razonamiento: «Si respondemos: ‘Del cielo’, él nos dirá: ‘Entonces, ¿por qué no creyeron en él?’.
Y si decimos: ‘De los hombres’, debemos temer a la multitud, porque todos consideran a Juan un profeta».
Por eso respondieron a Jesús: «No sabemos». El, por su parte, les respondió: «Entonces yo tampoco les diré con qué autoridad hago esto».

Evangelio según San Mateo 21,23-27
YouTube player

Cuando juzgas quedas como esclavo de tu prójimo, pues estás muy atenta a que se cumpla la sentencia que tu misma has dispuesto. Estás muy atenta a cada movimiento, palabra y obra que realice, esperando que la sentencias se cumpla. Tal vez esperando que la ley divina lo castigue escuchando el viejo refrán “Dos castiga sin palo ni cuarta”

Pero hay un “Dios que todo lo ve” y todo lo sabe, que no nos ha abandonado ni en la salud ni en la enfermedad, ni en lo prospero, ni en lo adverso. Un Dios justo, que hemos aprendido a decirle Padre Nuestro, por su encarnación en Jesucristo por obra de su Espíritu Santo. Y ante la ofensa el entrega misericordia, compasión y nos abraza con la creación, nos habla con su palabra y nos guía con su Espíritu Santo ara levantarnos y volver a tomar el camino, la verdad y la vida hacia los brazos de su Espíritu Santo donde nos entrega amor, paz, gozo, paciencia, amabilidad, mansedumbre y dominio de si,

Somos su bendición de Amor en esta tierra, la autoridad que tenemos viene de su misericordia, entonces, antes de pensar juzgar a tu prójimo, mira con que autoridad te sostienes, no sea que el Señor de la Misericordia te pida cuentas de la misericordia que te ha entregado, del perdón que te ha dado y en lugar de dar frutos, has escondido los dones recibidos para darle vida a la vida.

Abre y reenvía el mensaje del perdón

Mi Señor, me cuesta trabajo pensar que soy tu mensajero del perdón. Parece muy ostentoso sentir que me has enviado para hablarles de tu salvación Se me dificulta descubrir tú presencia en mi corazón y me cuesta trabajo hablarle al corazón de los demás, tengo rencores y resentimientos. Por eso acudo a ti. Fuente de misericordia y de sabiduría. Tú que me llamas insistentemente para que comparta tu Amor. Tu que tocas la puerta de mi alma y me dices “Abre” pidiendo que se exprese tu amor, que lleve tu mensaje de Amor.

Leo el evangelio de hoy buscando tu luz

YouTube player

Juan el Bautista oyó hablar en la cárcel de las obras de Cristo, y mandó a dos de sus discípulos para preguntarle:
«¿Eres tú el que ha de venir o debemos esperar a otro?».
Jesús les respondió: «Vayan a contar a Juan lo que ustedes oyen y ven:
los ciegos ven y los paralíticos caminan; los leprosos son purificados y los sordos oyen; los muertos resucitan y la Buena Noticia es anunciada a los pobres.
¡Y feliz aquel para quien yo no sea motivo de tropiezo!».
Mientras los enviados de Juan se retiraban, Jesús empezó a hablar de él a la multitud, diciendo: «¿Qué fueron a ver al desierto? ¿Una caña agitada por el viento?
¿Qué fueron a ver? ¿Un hombre vestido con refinamiento? Los que se visten de esa manera viven en los palacios de los reyes.
¿Qué fueron a ver entonces? ¿Un profeta? Les aseguro que sí, y más que un profeta.
El es aquel de quien está escrito: Yo envío a mi mensajero delante de ti, para prepararte el camino.

Les aseguro que no ha nacido ningún hombre más grande que Juan el Bautista; y sin embargo, el más pequeño en el Reino de los Cielos es más grande que él.

Esto es palabra de Dios

Evangelio según San Mateo 11,2-11.

Tu eres el que ha de venir, Tú eres el mensaje del Amor

Tú eres el mensajero del Padre, en quien, el Padre Nuestro, se complace. Antes vinieron los ángeles y los profetas, mensajeros a quienes ignoraron los padres de nuestros padres, luego el Padre nos mandó el mensaje contigo, su Hijo. Y lo mataron creyendo que matarían al heredero. Y resucitó el heredero, y sigues mandando lo que manda el padre. Eres el heredero que sigue llamando a la humanidad para que sea mensajera del amor en la humanidad.

Que gozo es compartir tu palabra con las personas que comen el pan de la palabra y disfrutan tu sazón. O beben el vino del sacrificio, que tu conviertes en tu sangre y reconocen tu sacrificio celestial. Tu eres el mensaje y el mensajero, compartes tu alma y divinidad para que conversemos con tu espíritu.

Nos has enviado a todos como mensaje y tus mensajeros de amor, especialmente hacia el doliente y a quien han contrariado el Amor. Quieres que les anunciemos tu presencia amorosa, entregarles tu palabra y tu espíritu de amor y vida.

Aún en los momentos más difíciles, nos sigues entregando la vida plena que viene del amor.

Nos envías para ser mensajeros del amor, especialmente con la pareja con quien decidí compartir el amor. Tu nos alimentas de amor, Somos expresión encarnada del Amor del Padre Nuestro. Que sea tu mensajero con los hijos, que son la bendición que tú nos has compartido, son renuevos en nuestra vida. Y nos insistes en que también son tus mensajeros los amigos, y quienes pasan por la calle, los desposeídos, los abandonados, las viudas, los huérfanos y los niños. Son mensajeros quienes nos contradicen, los enemigos… todos somos mensajeros algunos han consagrado su vida a responder libremente a ese llamado como sacerdotes y religiosos, ofreciendo su humanidad a tu servicio. Fortalece y guiame para que sea tu mensajero y tu mensaje de “la vida que viene del Amor”. Acompañame a perdonar a quien me ofendió. A pedir tu perdón a quien ofendí ocultando el Amor.

¡Que mejor regalo que abrir y reenvía el mensaje del perdón del Padre Nuestro. Tu anuncio Señor Jesucristo con tu Espíritu Santo.

Gracias Señor

Ofendí por no controlar mi carácter

¿Cómo pedir perdón a un hermano, a quien ofendí por no saber controlar mi carácter?

En este hecho hay dos partes que atender: Por un lado que no pudiste detener tu impulso de entregar ofensa a tu hermano y por otra parte, cómo pedir perdón por el dolor que te significa haber entregado ofensa.

En ambos casos, el perdón es la llave para restaurar el amor. Amor hacia ti y Amor hacia tu hermano.

Pedir perdón a tu hermano

El pedir perdón a tu hermano significa pedirle que te comparta el perdón que Dios le entrega. Pedir que exprese el Amor y la compasión que Dios ha puesto en tu hermano al igual que en ti.

Tú eres una expresión del Amor de Dios. Eres un Amor encarnado. Eres un Amor y amor es lo que en verdad puedes entregar. Es un error entregar ofensa, pues la ofensa es resultado de juicios y resentimientos que culpan a diferencia del Amor que al entregarlo salva.

Por eso, acepta el Amor y compasión que Dios te ha entregado y con amor y compasión bendice aprendiendo de tu error de contrariar el Amor y entregar ofensa a tu hermano.

Perdónate no entregar tu Amor

Esa misma acción también ocultó tu amor. Observa como has cultivado tu vida. Mira que ha crecido un carácter que oculta el amor, como cizaña que crece en el trigo de tu amor. Así pues, limpia tu consciencia de aquellas heridas que has experimentado en tu vida y que se han convertido en mascara de cizaña (de «mal carácter»). Está máscara la usas para protegerte o defender un hecho o una serie de hechos que marcaron tu vida y la máscara parece que esconde los efectos de las personas para que no te juzguen o se repitan los hechos dolorosos, que no has logrado sanar.

Pon pie firme en el Amor

Así que, si te cuesta trabajo relacionarte con tu hermano y contigo misma. Haz como en el baile: Pon poner el pie firme en el Amor de Dios., reconoce y acepta que es Padre Amoroso y compasivo. Que te Ama al extremo de encarnarse y sufrir hasta lo indecible para que te mires amada y en el amor corrijas errores que contradicen el Amor. Para que descubras que el Padre es el camino, la verdad y la vida. Que el Padre es el Espíritu Santo que nos guía y viene a nuestro encuentro. Que el Padre es Nuestro, de todos a pesar de los errores que ocultan el amor.

La profundidad en tu consciencia

No permitas que tu mente que juzga, condena y separa tome el control de tu vida. No permitas que rencores y resentimientos te empujen sin sentido. No dejes que tu cuerpo sea el tirano de tu existencia, ni los comentarios de la gente, tu imaginación o tus sueños. Inicia cada acción invocando al «Padre Nuestro»

Así poniendo la consciencia en el fondo de tu corazón

  1. Escucha cuando invocas diciendo: «Padre Nuestro»
  2. Descubre que el «Padre Nuestro es quien te escucha y quiere guiarte.
  3. Vive con el «Padre Nuestro».

El mensaje del Padre Nuestro

Hoy el evangelio tiene un mensaje para ti. Cada día tiene una tarea para ti. Deja que la buena noticia sea tu guía día a día. Escucha las palabras que pronuncias, descubre el testimonio de la voz y la presencia de Jesucristo y mirate en la presencia del Padre Nuestro.

Jesús dijo a sus discípulos

Es inevitable que haya escándalos, pero ¡ay de aquel que los ocasiona! Más le valdría que le ataran al cuello una piedra de moler y lo precipitaran al mar, antes que escandalizar a uno de estos pequeños. Por lo tanto, ¡tengan cuidado! Si tu hermano peca, repréndelo, y si se arrepiente, perdónalo. Y si peca siete veces al día contra ti, y otras tantas vuelve a ti, diciendo: ‘Me arrepiento’, perdónalo». Los Apóstoles dijeron al Señor: «Auméntanos la fe». El respondió: «Si ustedes tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, y dijeran a esa morera que está ahí: ‘Arráncate de raíz y plántate en el mar’, ella les obedecería.

Evangelio según San Lucas 17,1-6.

Agradece al Señor por tan hermosa respuesta que quiere llegar a tu alma, adolorida, profundiza en ella, para poder asimilar y aplicar tan maravillosa enseñanza.

Si no te quiere perdonar

Si dudas que tu hermano no te quiera perdonar. Ten Paciencia

Tal vez tu hermano lleva muchos años sin hablarte y nunca te ha querido escuchar. Todo se detonó por ofender. Y no supiste manejar tus emociones y cultivaste el rencor y las ofensas contra él. Comienza por sanar tu alma y admite el error por juzgar, Pide perdón.

El hecho pudo ser la repartición de una herencia o el querer imponer un poder sobre ti…

Suelta, acaso no es más importante tu paz que un mundo de monedas de oro

Así no tendrá poder ni económico ni de ninguna clase sobre ti. Con la verdad del Amor eres libre. Así se rompen las líneas de poder terrenal

Si, ya pediste el perdón. Tu hermano tiene al alternativa de entregar el perdón que Dios le concede o no tendrá perdón. Ruega por él. Suelta. Deja que el perdón de Dios fermente en su consciencia