Proteger al Papa

Hoy renaceré en el amor apoyado en mi bautizo y confirmación

Les comparto este artículo para hacer oración ahora, de manera particular por el santo padre el papa Benedicto XVII. Léanlo, medítenlo y pásenlo a todo aquel que ame a la iglesia y en ella a los que sucesores de los apóstoles. Seguro Dios nos ha de bendecir.

POB Eugenio García Siller

Por Juanjo Romero

Protect the Pope - http://protectthepope.com

La Visita Apostólica del Santo Padre al Reino Unido está desatando una campaña sin precedentes contra los católicos en general y el Papa en particular.
El Rev. Nick Donnelly, diácono permanente de la Diócesis de Lancaster ha creado el sitio Protect the Pope. Es mucho más que recopilador de agresiones, está planteado como un medio de defensa de la integridad física y moral, de amparo de la vida y la fama del Papa y los católicos.
Una defensa de la verdad, y como San Pablo, una apelación a la condición de «ciudadano romano» de los católicos, animándoles a hacer uso de los medios jurídicos y policiales necesarios para su protección. En la presentación, el Rev. Nick lo deja muy claro:

Se dice que el anticatolicismo es el último prejuicio aceptable, y a ello ayudan muchos católicos no haciéndole caso, con la esperanza de que desaparecerá solito. El espectáculo de ataques personales al Papa Benedicto XVI lo demuestra.
Desde 2006 tenemos el derecho legal de protegernos del odio religioso. Por supuesto que la gente en este país tiene derecho a la libertad de expresión, pero eso no quiere decir que tengan derecho a crear un clima de hostilidad y miedo. Es una cuestión de salvaguarda de nuestros derechos a la libertad de creencia y de culto

Me ha gustado mucho el planteamiento, y quizá envidia. Fuera de los héroes de Centro Jurídico Santo Tomás Moro hay muy poco en España, y la descripción de que muchos católicos contribuyen al tema por respetos humanos es trasladable.
Traduzco el «About» para que os podáis hacer una idea más certera:
Cuando comento la Visita del Santo Padre de septiembre con otros católicos, la mayoría expresa gran inquitud por su seguridad. En nivel de hostilidad sin precedentes, la ridiculización y la mala fe de algunas personalidades y medios de prensa ha provocado que muchos católicos estén preocupados porque el Papa Benedicto XVI sea injuriado o incluso herido.
Después de siglos de anticatolicismo institucional, si hay una cosa a lo que los católicos son sensibles en este país es al odio religioso, y hay un montón de evidencias de que ese odio levanta de nuevo su repugnante cabeza.